"Mucho antes de fin de año vamos a tener nuestro nuevo Obispo"

Lo dijo el padre Amadeo Tonello, miembro de la Arquidiócesis de Tucumán, tras darse a conocer la renuncia del Arzobispo de Tucumán, Alfredo Zecca, por razones de salud. Según el sacerdote, la decisión de Monseñor ya había sido puesta en consideración del Papa Francisco en el mes de febrero cuando visitó Roma. El nuevo titular del Arzobispado de la provincia tendrá entre dos o tres meses para radicarse en la provincia.


Tras conocerse la renuncia de monseñor Alfredo Zecca al Arzobispado de Tucumán, el padre Amadeo Tonello, miembro de la Arquidiócesis de Tucumán, explicó que significa la decisión del prelado para la comunidad católica de la provincia, a la vez que dio detalles de los pasos que se siguen según Derecho Canónico.

"Hemos tomado su decisión con mucha serenidad, sabiendo que la institución está por encima de las personas, y en el caso concreto de Monseñor Zecca, él ha hecho un discernimiento respecto de su salud y se ha encontrado con que lo más conveniente era presentar su renuncia", explicó. 

El sacerdote indicó que concretamente "Monseñor tiene un problema cardíaco bastante serio, tiene varios estens, entonces él ponderando las circunstancias fue madurando esta decisión que la conversó con el Santo Padre en febrero cuando estuvo en Roma y que la presentó a principios de este año y la hizo pública ayer", precisó. 

Tonello indicó que "la renuncia entra en vigor una vez que es aceptada por el Santo Padre Francisco, todavía eso no ha sucedido, pero sucederá pronto porque ya está hablado entre ellos dos", estimó. 

Posteriormente, dijo que "cuando sea aceptada, el Papa proveerá a la Diócesis con un nuevo Arzobispo. Es posible que en el mismo momento en que se manifieste la aceptación de la renuncia, se diga también quien es la persona que va a ser nombrada. Mientras tanto, Monseñor Zecca sigue al frente de la arquidiócesis hasta que asuma el nuevo Arzobispo". 

Tonello señaló que "la persona nombrada en el momento en que se hace público su nombramiento dispone entre dos y tres meses para trasladarse porque tenemos que pensar que es una persona que estará cumpliendo una función en otro lugar. Una vez que el Papa nombre y se haga público ese nombramiento, dos o tres meses después, nosotros tendremos el nuevo Obispo asumido entre nosotros, mientras tanto Monseñor Zecca sigue al frente de la arquidiócesis", reiteró. 

Para el clérigo, antes de fin de año se nombrará al reemplazante de Zecca. "Yo creo que antes de fin de año porque tenemos que pensar que el Papa ya estaba sabiendo de esta situación, y por lo tanto eso permite pensar que no van a ser tan largos los tiempos. Yo creo que antes de fin de año,  muchos antes, vamos a tener nuestro nuevo Obispo", expresó. 

Consultado por algunos nombres que podrían estar circulando, respondió que "no sería muy correcto en estos momento decir nombres. La iglesia tiene una serie de procedimientos para nombrar un nuevo Obispo que ya se habrán activado, por lo que sería poco respetuoso dar nombres porque pueden ser muchos nombres y es un poco temerario mencionar nombres porque a uno se le ocurra", manifestó. 

La renuncia 
El arzobispo de Tucumán, monseñor Alfredo Horacio Zecca, de 67 años, presentó su renuncia por razones de salud y dijo que espera que sea aceptada por el papa Francisco, para seguir cumpliendo funciones en la Iglesia pero desde otro lugar. 

En una carta dirigida a la comunidad diocesana, el prelado detalló los motivos de su decisión, pese a que podía continuar en el cargo hasta los 75 años como establece el Código de Derecho Canónico. 

“Mientras confío en que el Santo Padre acepte mi renuncia, invito a todos a continuar, con el mismo entusiasmo y la misma fuerza, trabajando en las metas pastorales que, como presbiterio, nos hemos trazado. Yo, por mi parte, me comprometo a cumplir plenamente mis funciones de gobierno hasta que sea designado mi sucesor”, subrayó en la misiva. 

El prelado afirmó que “la decisión que he tomado, con una cuota de dolor, tiene como único fundamento el amor que como pastor les profeso. Estoy convencido, en conciencia, de que sería un egoísmo de mi parte que, dada la fragilidad de mi salud, por todos conocida, continuara con la conducción de esta Iglesia hasta los 75 años en que se invita a los obispos a presentar su dimisión”. 

“Tucumán necesita un pastor más sano y, por lo demás, nadie es imprescindible. Dios, en su providencia, hará que esta Iglesia reciba un pastor que, con más fuerza que las mías, pueda hacer frente a los ingentes desafíos que se nos presentan y que serán crecientemente exigentes en el futuro”, sostuvo. 

“Con este espíritu los invito, queridos hermanos, a continuar en paz y armonía con nuestra tarea pastoral y a la confianza en que el Señor enviará a nuestra Iglesia un pastor según su corazón. Al mismo tiempo dispongámonos con generosidad a recibir, en el tiempo oportuno, al arzobispo que el Santo Padre designe”, pidió. 

G.I

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