La senadora Mirkin apoya el reclamo de empresarios azucareros

Distintas voces se alzaron en contra de las nuevas disposiciones de Aranguren, quien rectificó los montos y en vez de reducir el precio del bioetanol en un 15% hasta fines de enero, lo hizo del 7,5%. “Crece el reclamo y la preocupación en los sectores productivos de la caña de azúcar por las medidas que viene adoptando en contra del sector el gobierno nacional”, sostuvo la parlamentaria.

En declaraciones efectuadas por la senadora nacional, Beatriz Mirkin (Tucumán PJ-FpV) aseguró que “Crece el reclamo y la preocupación en los sectores productivos de la caña de azúcar por las medidas que viene adoptando en contra del sector el gobierno nacional”. En ese sentido,  el presidente del Centro Azucarero Regional de Tucumán, Fernando Nicolás Corzo y el secretario de la entidad, Julio José Colombres, enviaron una misiva a la senadora Mirkin para “solicitar su intervención por las decisiones del gobierno nacional que afectan al sector: al precio de los biocombustibles a partir de la caña de azúcar, y al proyecto de Ley que propone un aumento de los impuestos internos a las bebidas edulcoradas con azúcar”.

En la misiva, los productores sostienen que “a partir del aumento del 2% en el corte de los combustibles dispuestos por el actual gobierno nacional en el año 2016, los ingenios que no participan del plan debieron realizar importantes inversiones, para cumplir con los cupos que se les asignara en el marco de la Ley, debiendo hacer lo propio los ingenios que estando ya incorporados debieron ampliar su capacidad de producción para atender la ampliación de sus cupos. La decisión adoptada en orden de modificación del precio del Biocombustible, viene a alterar las ecuaciones económicas financieras en unas y otras empresas, haciendo así difícil, sino imposible, su continuidad productiva, lo que adquiere mayor gravedad, si cabe, frente a la consideración que tales medidas vienen a desconocer el régimen de Ley 26093. 

Además, señalan que “se ha desconocido tanto la letra como el espíritu de la ley y el régimen jurídico aplicable a la actividad, violándose la seguridad jurídica y el principio de confianza, principios que, paradójicamente, son los que reclaman los inversores extranjeros”.

Respecto del aumento de impuestos internos aseguran que  “son hostiles y discriminatorias, respecto a un producto de fabricación nacional, como es el azúcar para el edulcorado de bebidas gaseosas, ya que eleva en un 112% la alícuota para bebidas azucaradas, por un lado, mientras que si son bebidas azucaradas y saborizadas con jugos naturales, la alícuota se eleva un 325%. Reiterados ensayos llevados a cabo en el mundo, con iguales medios, encarece el producto via impuestos para desincentivar el consumo, e idéntica finalidad, mejorar la salud de la población, fracasaron en sus intentos, lo que demuestra que desincentivar el consumo de azúcar no es el camino para luchar contra la obesidad y otras enfermedades. Las medidas que cuestionamos generará importantes pérdidas en puestos de trabajo en la cadena azucarera y en las industrias de bebidas. El empleo directo e indirecto en  el noeste de nuestro país está estimado en 200.000 puestos de trabajo, solo para la cadena sucroalcoholera, el impacto sobre el sistema previsional será de gran magnitud”.

“Conforme a un estudio publicado por el Instituto de Desarrollo Productivo (IDEP) en 2015 unas 367.000 toneladas métricas de azúcar se utilizan para el endulzado de bebidas son alcohol en  nuestro país, lo que implica que del total del consumo nacional de azúcar, (1,55 millones de toneladas métricas) más del 23% tiene tal destino, de lo que deriva que se trata de un mercado extremadamente importante para nuestra actividad”, finaliza la epístola.

La Senadora Mirkin recordó el proyecto de ley presentado con el Senador Alperovich, por el que se incorpora a la Ley de Biocombustibles el procedimiento de determinación de precios del bioetanol estuvo vigente en octubre pasado; y que estará alerta para cuando llegue la propuesta de una mayor carga impositiva para el azúcar, para evitar que ésta sea afectada en su competitividad frente a otros endulzantes que gozan de privilegios.

G.I

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