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Brasil realiza su primer paro general en 20 años ante una dura reforma laboral y jubilatoria

El miércoles el congreso brasileño dio media sanción a estas modificaciones. Los sindicatos confían en que sea la mayor protesta en la historia reciente del país.

Los principales sindicatos y movimientos sociales de izquierda de Brasil convocaron para este viernes un paro nacional contra las reformas económicas del Gobierno de Michel Temer, el primero en este país desde 1996.

Los principales sindicatos y movimientos sociales, como el Frente Brasil Popular y Povo Sem Medo (Pueblo Sin Miedo), convocaron el paro de este viernes contra la reforma de las pensiones, la reforma laboral y de ley de externalización del trabajo. Los críticos con estas medidas advierten que los derechos de los trabajadores se verán recortados gravemente y que el Gobierno Temer aprovecha la crisis económica que atraviesa el país para implantar una receta neoliberal. También destacan que todas estas reformas no fueron avaladas por las urnas, ya que Temer accedió al poder a través del controvertido "impeachment" contra Rousseff, por lo que le consideran ilegítimo. 

Los sindicatos brasileños confían que "será la mayor movilización de la historia reciente del país", dijo a Sputnik el secretario de Administración de la Central Única de los Trabajadores (CUT), Quintino Severo.

"Hay un sentimiento muy fuerte en la población, en la clase trabajadora, de que la huelga será muy amplia; será la mayor de los últimos años porque se trata de algo muy importante: combatir las reformas del Gobierno golpista", sostuvo Severo.

Uno de los principales argumentos de la movilización es la reforma laboral, que según el Gobierno ayudará a generar empleo flexibilizando la legislación, pero que para los sindicatos y partidos opositores servirá para que aumente la precariedad y se recorten derechos históricos de los trabajadores.

La reforma laboral fue aprobada el miércoles por la noche en la Cámara de Diputados por una amplia mayoría y ahora se espera el visto bueno del Senado para que entre en vigor.

"El míercoles  se votó la primera fase, entendemos que la respuesta de los trabajadores servirá para presionar a los senadores; con una huelga fuerte podemos conseguir otra correlación de fuerzas (…) Hemos perdido el primer "round", pero la resistencia continúa", advirtió el sindicalista.

Severo explicó a Sputnik que la jornada de este viernes estará más centrada en la paralización de la actividad económica que en la organización de manifestaciones convencionales.

Una de las acciones más destacadas del día podría ser el bloqueo del Aeropuerto Internacional de Guarulhos, en São Paulo, el más grande de América Latina.

La última huelga general se produjo en Brasil en 1996, bajo el gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), del Partido de la Social Democracia Brasileña. Los trabajadores protestaron el 21 de junio de ese año contra las privatizaciones, el desempleo y la flexibilización de los derechos laborales, y según los sindicatos la protesta involucró a 12 millones de brasileños, el 19 por ciento de la población activa.

GP.

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