Un deportista quiere poner a Tucumán en la cima del mundo

Pablo Zelaya ascenderá al Everest para dejar simbólicamente a Tucumán en la cumbre del mundo. Manzur lo recibió en su despacho de Casa de Gobierno para brindarle su apoyo


Para conmemorar el Bicentenario de la Independencia, el deportista tucumano Pablo Zelaya ascenderá al Everest para dejar simbólicamente a Tucumán en la cumbre del mundo. El gobernador Juan Manzur lo recibió en su despacho de Casa de Gobierno para brindarle su apoyo y el acompañamiento de toda la provincia para concretar el desafío.

Zelaya, que se dedica hace 21 años al montañismo como deportista y guía de excursiones, contó al término de la reunión con Manzur que “el gobernador me manifestó todo su apoyo y se puso a disposición para lo que necesite”, y aseguró que “es un orgullo que la provincia se comprometa y se ponga la camiseta para que Tucumán sea el techo el mundo”

El deportista afirmó que el Bicentenario de la Independencia nacional es una de sus principales motivaciones: “es muy importante que los tucumanos, y la provincia como cuna de la Independencia, tengamos una participación activa”.

El ascenso a la cumbre de casi 9000 metros sobre el nivel del mar se llevará cabo entre el 27 de abril y el 10 de mayo por la cara norte del monte Everest, la más vertical, sin guías y sin servicio de asistencia ni oxígeno, detalló Zelaya.

Para dejar una marca que represente a la provincia en la cumbre del monte más alto del planeta, el deportista llevará una bandera por los 200 años de la Declaración de Independencia que sería izada en un monolito del lugar.

El secretario de Deportes, José Banegas, presente durante el encuentro, sostuvo que “es importante acompañar en estos sueños a los hombres que están viviendo el Bicentenario” porque “es una gran patriada deportiva y un ejemplo de tenacidad y constancia”.

“Nos ponemos a disposición de este tucumano que quiere lo mejor para su país, para su provincia, con todo el esfuerzo que significa y simboliza alcanzar lo más alto de algo”, concluyó Banegas.

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