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Los vecinos de la joven quemada y desmembrada no quieren que la madre vuelva al barrio

Creen que podría obtener un arresto domiciliario porque sufre una enfermedad terminal y tiene 3 hijos menores. Está detenida por el crimen.

 

La casa donde asesinaron a Noemí Juárez en Tucumán está cerrada. Una cinta perimetral roja y blanca mantiene cercada la entrada que ahora está custodiada por la policía. El barrio San Cayetano que vio crecer a la joven de 20 años se llenó primero de dolor y con el correr de las horas de indignación. No quieren volver a ver a la mamá de la víctima, quien está detenida junto a su pareja por el crimen.

Ni Lorena Frenoux ni Álvaro Adra declararon hasta ahora. Se sabe que el fiscal a cargo de la investigación pidió el traslado del padrastro al penal de Villa Urquiza por la gravedad de la acusación en su contra y porque considera que existe peligro de fuga. En el caso de la mujer, aunque también pidió su traslado a la cárcel, trascendió que podrían concederle un arresto domiciliario debido a que sufre una enfermedad terminal y tiene otros tres hijos menores de edad.

“No la quieren en el barrio por lo que ha hecho. Llega a entrar a su casa y sigue dañando a las chicas, acá la van a agarrar todos los vecinos”, advirtió una vecina al diario La Gaceta y añadió: "Ni un animal, ni un perro hace lo que ella hizo con su propia hija. Nosotros la conocemos".

El crimen fue macabro. Noemí fue estrangulada, quemada, desmembrada y su cuerpo lo encontró la policía entre la basura, en el fondo de su propia casa. En el lugar había una cuerda con la que la habrían asesinado y también un bidón de nafta de cinco litros, con poco combustible en su interior.

Aparentemente, el fuego habría provocado el desmembramiento de las extremidades inferiores de la víctima y, por ese motivo, es poco probable que pueda confirmarse si sufrió un ataque sexual antes de su muerte, que ocurrió unas 24 horas antes de que la encontraran.

Según surgió de la investigación, la chica había rechazado más de una vez las insinuaciones de su padrastro para que tuvieran una relación y esa habría sido la razón que desencadenó la tragedia. La sospecha es que la madre de Noemí no solamente no la protegió sino que además, encubrió a su pareja después de que asesinara a su hija.

G.I

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