INTERNACIONALES |

Estuvo cinco días entre los escombros del puente de Génova hasta que encontraron a su hijo, Mirko

Con él, el número de víctima mortales asciende a 43. Junto a los rescatistas en Génova estuvo Paola, madre de Mirko. “No me iré de aquí hasta que lo encuentren”, aseguró tan pronto como el viaducto se desplomó. Y así fue.

Mirko Vicini, trabajador de 31 años de la municipalidad genovesa de Amiu, es la última víctima hallada entre los escombros del puente de Génova. Con él, el balance de fallecidos se cierra en 43 víctimas mortales.
 

En el lugar de los hechos, pendiente de que le encontraran ha estado una mujer que no se ha movido desde el martes por la mañana. Ella es su madre, Paola, que ha permanecido día tras día observando a los equipos de bomberos transportando las pilas de escombros. “No me iré de aquí hasta que lo encuentren”, aseguró tan pronto como el viaducto se desplomó. Y así ha sido.

Mirko Vicini, trabajador de 31 años de la municipalidad genovesa de Amiu, es la última víctima hallada entre los escombros del puente de Génova.

De vez en cuando, Paola detenía a los rescatistas preguntando si alguien había oído algo. Poco a poco las esperanzas fueron menguando, especialmente cuando los bomberos rescataron a Bruno Casagrande, el compañero de Mirko que viajaba con él en la furgoneta. Fue de los primeros en ser encontrado por los servicios de emergencias, mientras el de Mirko permanecía desaparecido.
 

”No puedo creer que realmente haya sucedido”, repetía constantemente Paola. “No quiero irme a casa, quiero esperar aquí, quiero estar cuando lo encuentren”, insistía la madre de la joven víctima que encontró el apoyo en su ex marido y padre de Mirko, Graziano, que también se acercó a los restos del puente.

Para hacerle la estancia más llevadera, los directivos de Amiu, la empresa municipal de recogida de basuras y reciclaje en la que trabajaba su hijo y que se encuentra justo debajo del puente siniestrado, pusieron a su disposición un cuarto en el edificio de la compañía. Además, los bomberos le dieron una cama plegable. La Cruz Roja también quiso apaciguar su ansiedad montando una caravana para ella al otro lado del río Polcevera. Todo esto tras intentar convencerla, sin éxito, de que se marchara a casa a descansar.

Con el hallazgo del cadáver de Mirko y la muerte de Marian Rosca en el Policlínico San Martino, se elevó a 43 el número de muertos por el colapso del puente Morandi. Previamente los bomberos habían encontrado en la noche del viernes al sábado a una familia de tres personas, la familia Cecala. El coche en el que viajaban quedó completamente aplastado y sepultado por un gran bloque de cemento.

Diario La Vanguardia.

Dejá tu comentario