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Qué es lo mejor después de una separación: bloquear, espiar o ignorar

Terminar una relación después de mucho tiempo no es fácil pero lo mejor es tratar de no espiar las redes sociales para controlar qué hace la otra persona de su vida.

No es nada nuevo decir que las redes sociales cambiaron la dinámica de las relaciones de pareja y con eso la forma en la que las personas reaccionan y se comportan luego de una separación.

Existen algunos que prefieren la opción de bloquear a su ex pareja de todas las redes, sin embargo hay otros que no lo hacen, ya que prefieren mantenerse al tanto de lo que hace o deja de hacer esa persona una vez finalizada la relación. Esto también se conoce como stalkear.

Lo que puede parecer simpático y gracioso en un primer momento, puede llegar un punto donde se genere una obsesión con el tema y el espionaje se haga cada vez más frecuente y extremo. Primero se comienzan a revisar los perfiles de redes como Facebook o Instagram, pero luego de va a otras como Twitter, Youtube o LinkedIn.

Bien sabemos que espiar a un ex después de una relación no tiene nada de productivo e incluso afecta el propio bienestar, ya que hace más difícil el duelo y el cierre de los ciclos. Pero a pesar de eso es una práctica muy común.

El sitio Tech.Co encuestó a 2 mil personas sobre su comportamiento online luego de una ruptura. El 26% de los participantes reconocieron que serían capaces de crear una cuenta falsa para espiar a su ex. También admitieron que lo harían con sus viejos amigos.

Profesoras de la Universidad de Ohio en Estados Unidos realizaron un estudio que revela los motivos que hacen que una persona tenga la “necesidad” de espiar a su ex pareja. Se cree que se da por los altos niveles de miedo y de ansiedad que ocasiona la separación, ya que, para algunos, es abrumante la idea de haber perdido a esa persona querida para siempre. Esto suele ocurrir mayormente en parejas que durante toda la relación estuvo acompañada por sentimientos de inseguridad.

También, quienes miran las redes sociales de los ex, por lo general sufren de preocupación, complejo de inferioridad y malinterpretan todo lo que ven en fotos, publicaciones y comentarios. Eso hace que su ánimo esté por el piso y se sientan muy mal.

Las conclusiones del estudio aseguran que esta práctica no satisface la ansiedad que genera la ruptura, sino que la empeora. De esta manera, al realizar el espionaje los individuos son más propensos a interpretar de manera negativa distintos contenidos, lo que crea más conflicto, tensión y malestar.

Por ese motivo, cuando una relación termina lo ideal es poder poner un distancia. Si bien es difícil, es importante poder hacerlo para evitar obsesionarte con tu ex y con lo que el o ella hace en su día a día.

Si es necesario, eliminá a esa personas de las redes y tratá de resistir el impulso cada vez que te tientes a revisar sus cosas. Aunque al principio cueste, en un futuro te alegrarás por no haberlo hecho. Podrás hacer el duelo de una manera más sana y te recuperarás más rápido.

Para ayudarte a lograr tu objetivo, lo primero que tenés que saber es que tenés que cambiar el punto de vista. En lugar de enfocarte en tu ex pareja, lo mejor es que te enfoques en vos, en tus amistades y quienes te quieren. Aprovechá el tiempo para hacer lo que te guste y hacé cosas con las que te sientas feliz y realizado.

Esta investigación también reveló que las parejas que ponen fin a la relación en buenos términos y en común acuerdo, los procesos de desapego son más fáciles y sienten menos necesidad de espiarlos por las redes.

Fuente: Buena Vibra

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